El Senado aprobó el lunes un proyecto de ley conocido como la Ley Laken Riley, que busca ampliar el mandato del gobierno federal para detener a inmigrantes indocumentados. Esta medida, que cumple con una promesa de campaña del presidente Trump de apoyar las leyes migratorias, ha generado controversia y debate.
La ley lleva el nombre de Laken Riley, una estudiante de enfermería de 22 años asesinada el año pasado por un inmigrante venezolano indocumentado con antecedentes penales. El trágico caso impulsó a los legisladores a buscar más estrictas para la detención de inmigrantes que se encuentren en el país ilegalmente.
Con una votación de 64 a 35, el Senado aprobó la legislación que amplía la detención obligatoria – es decir, la detención sin posibilidad de fianza – para incluir a los no ciudadanos condenados o acusados de una variedad de delitos, incluyendo robo, hurto. y hurto en tiendas.
Los defensores de la ley, argumentan que esta medida es necesaria para proteger la seguridad pública y prevenir futuros crímenes.
Sin embargo, organizaciones de derechos humanos, critican la ley por considerarla discriminatoria y excesivamente punitiva.
La Ley Laken Riley también faculta a los fiscales generales estatales a demandar al gobierno federal si consideran que las políticas migratorias perjudican a sus estados. Esta disposición podría abrir la puerta a numerosas batallas legales entre los estados y el gobierno federal.
La Cámara de Representantes, que ya aprobó una versión anterior del proyecto de ley, deberá votar nuevamente para aprobar las enmiendas del Senado. Se espera que la ley llegue al escritorio del presidente Trump en los próximos días.