El IRS ha llegado a un acuerdo de entendimiento con el DHS con el fin de revelar información sensible como dirección de domicilio de migrantes indocumentados
De acuerdo a varios medios internacionales y un documento legal introducido en el Distrito de Columbia el día de ayer, el ente federal de recaudación de impuestos conocido por sus siglas en inglés como IRS ha llegado a un acuerdo con el Departamento de Seguridad Nacional para ofrecer información sensible sobre los migrantes indocumentados que pagan sus impuestos en el país, con el objetivo de detener a aquellos que estén siendo buscados por las autoridades.
Según un comunicado difundido por varios medios, el IRS y el DHS han llegado a un entendimiento a través de la creación de un documento que establecerá las normas a través de la cual se hará saber la información necesaria de los migrantes indocumentados en el país, con el fin de facilitar las labores de seguridad migratoria y nacional.

Una de las prioridades del entendimiento es poder ubicar a aquellos migrantes indocumentados quienes se encuentran siendo buscados por la justicia, como aquellos que han fallado o se niegan a irse del país luego de haber sido ordenados de hacerlo y de tener una orden de expulsión.
Un comunicado emitido por el Departamento de Tesoro expresa: «Después de cuatro años de Joe Biden inundando la nación con extranjeros ilegales, la máxima prioridad del presidente Trump es garantizar la seguridad del pueblo estadounidense».
La decisión genera miedo e incertidumbre en las comunidades migrantes
Las cifras registradas por el Censo Nacional estiman que al menos 11 millones de personas que residen en los Estados Unidos son migrantes indocumentados; y diversos estudios afirman que más de 8 millones de ellos contribuyen activamente a la nación a través del pago de los impuestos.
No obstante, esta nueva medida llena de miedo e incertidumbre a la comunidad migrante días antes de vencerse el plazo para la declaración del impuesto sobre la renta, el cual cerrará el próximo 15 de marzo.
Algunos migrantes sienten miedo de acercarse a las oficinas del IRS a oficializar su ITIN al tener un estatus migratorio en proceso; sin embargo, también temen que al no declarar impuestos puedan sufrir algún tipo de penalización financiera o legal. Mientras tanto, otros migrantes se muestran inquietos ante la medida y que su respectiva aplicación en el futuro inmediato resulte en una expulsión del país.
Este nuevo acuerdo cambia de forma histórica y abrupta la manera en la que la agencia de impuestos usa su excepción para perseguir casos criminales, así como la relación entre el ente recaudador de impuestos y la población migrante y trabajadora que hace vida en el país.